Cuando mis papás comenzaron a construir la casa en la que vivo el elemento más importante fue el piso. En un principio querían hacer su propio diseño pero al no se posible se decidieron por este mosaico amarillo y verde. Lo que me llama la atención de esto es el sentido de identidad que le puede dar a un espacio y como cada quien puede apropiarse de un diseño y hacerlo propio. Esto es algo que no solo veo en mi casa sino en muchas en la ciudad, en cualquier zona, cualquier estrato social siempre cumplen esta función de dejar que este elemento permita que cada quien se pueda apropiar de su propio espacio. Esta obra al estar modulada puede cobrar cualquier dimensión y busca de la misma manera apropiarse del espacio cubriéndolo con un elemento que debería ser plano pero al ser tridimensional llena aun más el espacio.
La obra se compone por módulos de papel amarillo de block de aproximadamente 20x20cm que se pegan en las esquinas y en el centro en pliegos de cartulina o papel pintados de verde. Las dimensiones que puede cobrar son totalmente adaptables al espacio, podría ser una o dos paredes, una esquina, el piso y el techo.
